Marcus Korey (monje rahelita)
Cuentan las leyendas, que antes de que el hombre fuera hombre, en Evaldaric vivían los Alados, de extraordinaria belleza y poder. Cuentan las leyendas que por aquel entonces solo había luz en Evaldaric, pues el Gran Demiurgo, creador del todo y de la nada, gobernaba vigilante y sin descanso el mundo a través de sus hijas, Sol y Luna, a las que tan celosamente quería que las convirtió en dos esferas gigantescas de fuego, para que así ninguno de los Alados pudiera acercarse siquiera a ellas. Sol y Luna iluminaban Evaldaric continuamente para dar calor y protección a los Alados. Cuentan las leyendas que Rahlé, el mejor de los Alados y el favorito del Gran Demiurgo, comenzó a cortejar a Luna, y su amor, al ser correspondido, se tornó tan fuerte que le protegía de las llamas cada vez que yacían juntos en su lecho de amor. Cuentan las leyendas que cuando el Gran Demiurgo les descubrió, entró en una cólera tal, que su voz se convirtió en muerte, y a una palabra suya, Rahlé el bello, Rahlé el osado, salió disparado contra la tierra de Evaldaric, esa tierra que los Alados nunca habían pisado. El impacto fue tal, que abrió un enorme cráter de una profundidad insondable en la tierra. Luna entristeció tanto por la perdida de su amor, que se convirtió en un astro blanco y frío, pues ya no quería ni iluminar ni dar calor al resto de los Alados, y así nació Noche, hija de Luna y de Rahlé. Los Alados, para no disgustar al Gran Demiurgo, le dieron la espalda a Luna. Cuando Noche o Luna llegaban, corrían a esconderse y cerraban sus ojos para no verlas. Así que solo salían a vivir felices cuando estaba Sol presente. A esos los llamaron los Akhur... “los que viven felices bajo Sol”. Y aquí, en La Gran Llaga, en el mismísimo lugar donde Rahlé cayó, donde sucedió la Gran Pérdida, es donde fundamos la gran ciudad de Rahlé, para llorar su dolor, adorarle y esperar su regreso... Rahlé al Karuth1!
1- Rahlé volverá!
Rahlé (el primero entre los Alados)
-Saludos Hermano Korey, vuestra historia es en sumo atractiva. Pero perdonad que os lo comente. Cual es la actitud de los Rahelitas ante la Iglesia de Jainus, el profeta. Creo que como embajador de la Republica, es necesario conocer aspectos de fe algo...digamos...polemicos. Independientemente, respetamos las creencias de los Rahelitas, sean cuales sean, siempre que el comercio fluya entre nuestros pueblos- El embajador esboza una sonrisa mientras une las palmas de las manos.
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